Portada del sitio > Master 2 RICI > 2010-2011 > Élodie Dekeyzer > « África Latina », un descubrimiento y una revelación
« África Latina », un descubrimiento y una revelación
Domingo 13 de febrero de 2011, por
Elodie Dekeyzer se fue tres meses a Oaxaca en México, para realizar una práctica profesional en la Casa de la Cultura Oaxaqueña. Por medio de un proyecto que coordinó, descubrió una parte de la historia mexicana y de su pueblo que hasta entonces desconocía.
Fui a Oaxaca con la idea, entre otras, de desarrollar un proyecto sobre el arte africano ya que este continente es poco conocido por los latinoamericanos y me interesa esa cultura. Quería exponer las fotografías de una artista africana, que tuve oportunidad de ver durante mi estadía en España. Pero cuando gracias a mis compañeros de trabajo me enteré de que existían mexicanos negros y que Oaxaca era uno de los estados más representativos de la negritud, fue para mí un afortunado descubrimiento. Los afrodescendientes constituyen una parte de la población mexicana negada y discriminada a pesar de la contribución que han hecho a la construcción de la identidad mexicana.
Mi proyecto tomaba aun más sentido. Busqué entonces el modo de revalorizar el vínculo intrínseco con Africa que comparten México y América Latina. Así nació “África Latina”. El objetivo era expresar la multiculturalidad oaxaqueña desde sus raíces africanas, mediante una exposición colectiva de esculturas y fotografías de "afros" de la Costa Chica y de negros de África. Junto a ello, danzas, proyección de un documental y un debate con el realizador.
Esta interacción entre mi cultura francesa, la cultura mexicana y la africana fue para mí una experiencia intercultural muy enriquecedora. Ver fusionarse los sistemas de cada cultura, conocer la cultura del otro y darse cuenta que la identidad mexicana no es única sino plural, es una expereiencia hermosa y sorprendente. Llegas a un lugar pensando conocer su pasado y descubres que cada país tiene una historia, un pasado con sus secretos ocultos, que la mayoría de la gente no conoce. Tuve una sensación de privilegio al compartir con otros una suerte de secreto íntimo que debía salir a la luz.
Dando visibilidad a la "tercera raíz"
Gracias a este proyecto tuve la oportunidad de entrar en contacto con líderes, artistas, antropólogos, músicos, bailarines que tratan de rescatar la “tercera raíz”. En cada cita, tenía la impresión de entrar en el mundo secreto de cada cual. Cada persona me contaba sus anécdotas respeto a la tercera raíz, la relación particular que tenía con ella : por la sangre, por tener abuelos negros o por simple interés. Cuando entré en la casa de los famosos Lorena y los Alebrijes, [1] fue como si hubiera entrado en la caverna de Ali Baba, por todos los tesoros que tienen, todos los instrumentos de madera con los que tocan, por las historias que tiene cada objeto.
Cada vez que ina yo sabía a qué hora llegaría a su casa pero no sabía nunca a qué hora saldría porque me quedaba atrapada y apasionada por el amor con el que cuentan las cosas. Me sentía como una niña escuchando las historias del abuelo.
El día del evento, fue emocionante ver tanta gente reunida para defender a los afromexicanos y sentí orgullo cuando otros mexicanos me animaban a que siguiera organizando eventos así y me agradecían por haber ayudado a dar más visibilidad a la tercera raíz. Desde entonces, me siento comprometida con esa gente olvidada y me dieron ganas de seguir adelante trabajando por la visibilidad de los afrolatinos.
Un sistema cultural en adecuación con mi ser
Durante ese proyecto, me di mucho más cuenta de hasta qué punto cada país tiene un sistema cultural distinto, con su propio funcionamiento. En México, por ejemplo la noción de exactitud es casi inexistente y llegar atrasado a una cita es habitual. Los artistas con los cuales habíamos convenidos juntarnos o yo misma, podíamos cancelar o posponer la cita con mucha más facilidad que en Francia.
Otro aspecto interesante, la relación con los otros, que es más cercana y cariñosa. Se nota sobre todo en cómo se besan cuando se saludan. A diferencia de los cuatro besos "formales" de Francia, se da un solo beso que me pareció más sincero y más cálido.
Fue sorprendente para mi ver que me sentía más cómoda con la manera de ser de otro país que con la del mío. No tuve dificultades para adaptarme a ese nuevo sistema cultural. Al igual que en los viajes que pude realizar antes, me di cuenta que estaba más en adecuación con mis valores, mis concepciones de la vida y mis pasiones. En definitiva con lo que yo soy.
Por eso, espero con ansias poder realizar este año mi segunda práctica en otro país de América Latina, para vivir plenamente un nuevo encuentro con su gente, sus costumbres, sus particularidades y su historia.
- Ver también: Gahi Traoré habla de Elodie.
– Dos páginas web que que les recomiendo descubrir :
[1] Lorena es una artista oaxaqueña que desarrolla su trabajo junto a una banda llamada Los Alebrijes